Vientos de Primavera

El viento sopla con fuerza esta noche, golpeando las ventanas de tu mente. Los cristales crujen y los cimientos se tambalean; formando recuerdos que se entrelazan en una extraña ausencia.

Un frío helador se cuela por cada rendija de la casa. Una maraña de pensamientos y emociones que tratan de destrozar la poca cordura que te queda. Sientes un escalofrío recorre tu cuerpo, una incesante punzada de temor y rebeldía, un pinchazo de lucidez y locura que te hace ver la realidad por un instante...

Poco a poco el viento te envuelve en su gélido y mortal abrazo. Gimes, gritas y pataleas pero nada detiene su avance.

No eres más que un chiquillo tiritando trozos de soledad y miedo.

Día 1

¿Cómo me siento?

Jodido la verdad, realmente jodido y frágil, jodidamente frágil, como un puto vaso de cristal . Siento como si estuviera a punto de romperme en mil pedazos al chocar contra el duro suelo...

Sé que seguramente me arrepentiré dentro de algunos días de lo que digo pero  ojalá no tuviera sentimientos. Ojalá fuera un trozo de carne inerte sin sueños e ilusiones, un pedazo de masa biológica que sólo cumple sus funciones vitales (comer, follar y dormir); un ente sin sentimientos.

Sin sentimientos... sería todo mucho más fácil. Nada de tristeza, agobio o miedo; nada de empatía, decepciones o depresiones. Dejaría de ser feliz y tampoco sentiría las cosas buenas, sí, pero ahora mismo eso me importa una mierda; únicamente deseo ir a mi cuarto, meterme en la cama y soñar para siempre. Soñar con un mundo existan sentimientos, un mundo donde todo saliera bien y no le tuvieras miedo a nada, un mundo que pudiera moldear a mi antojo.

Esta noche soñaré con mi mundo perfecto...

"Pero este sauce quiere sonreír..."